La enzima prodigiosa

Resumen La enzima prodigiosa (Hiromi Shinya)


Resumen del Libro La enzima prodigiosa

En el resumen del libro La enzima prodigiosa, el autor nos enseña las ideas, los principios y las filosofías que integran el Sistema Cuerpo-Espejo de Curación y Autoconocimiento. Mi deseo es que te sea de utilidad para conocerte a ti mismo y para saber cómo curarte a ti y a los demás.

El estado natural de la consciencia es el equilibrio.

La salud es la vuelta al estado de equilibrio y a la integridad física. En nuestra sociedad se nos ha enseñado a pensar que las causas de las enfermedades o de los problemas físicos provienen del exterior. Si bien, en el plano físico, esto es cierto, también es verdad que ello sucede sólo cuando las circunstancias de tu consciencia lo permiten.

Si continúas con la tendencia de buscar remedios y soluciones externas, seguirás sin ver las situaciones de tu vida y las tensiones de tu consciencia con las que están relacionados —y que de hecho han creado— los síntomas físicos.

En consecuencia, te verás como una víctima de las circunstancias y serás incapaz de liberar las tensiones de tu consciencia que se interponen entre ti, la salud y la felicidad que buscas.

Podemos definir la curación como el retorno al equilibrio, a la armonía y a la salud. Aquel que cura a otra persona le está ayudando a recobrar su salud. Quienes se curan a sí mismos o se adentran de alguna manera en la autocuración se están haciendo volver a sí mismos a la experiencia de la salud.

Utilizamos la palabra «curación» (o «sanación») para describir el proceso que tiene por objeto hacer que el individuo —la persona que recibe la curación— recobre su bienestar. Curación también es la palabra que damos al resultado final cuando el proceso tiene éxito. Decimos entonces que la persona se ha curado.

En algún lugar de tu interior hay un estado de consciencia en el cual los aspectos que constituyen tu vida están en un perfecto equilibrio, experimentando una salud perfecta. De hecho, ése es tu estado natural de ser.

Cuando experimentas dicho estado de consciencia eres capaz de responder a las situaciones que se te presentan con una eficacia óptima, estás en contacto con tu voz interior, tu intuición, y la escuchas. Eres tú mismo. Y estás sano.

Tu consciencia representa todo aquello que puedes experimentar.

Todas tus percepciones, tus sensaciones, los procesos mentales y los estados de ser que eres capaz de producir tienen lugar dentro de lo que llamamos consciencia.

Tu consciencia se puede dividir en siete categorías y cada una de ellas está relacionada con un particular centro de energía o chakra.

La consciencia es un sistema de energía. Está compuesta por diferentes densidades de energía en un estado de flujo, de movimiento. Cuando la energía fluye suavemente, uno experimenta un estado de totalidad. En cambio, cuando esa energía se bloquea experimentamos tensiones que pueden manifestarse como síntomas.

Los chakras funcionan como bombas o válvulas que regulan el flujo de energía a través de todo el sistema energético. Por lo tanto, el estado de tus chakras es el que determinará el estado del flujo de energía en tu consciencia.

El funcionamiento de los chakras refleja tus decisiones sobre cómo responder a las diversas situaciones de tu vida. Tú abres o cierras esas válvulas cuando decides qué pensar y qué sentir, y qué filtro perceptual eliges para experimentar el mundo que te rodea. Lo importante, desde luego, es mantener funcionando suave y armónicamente todas las válvulas, como las válvulas de una flauta.

Cuando en tu consciencia hay una tensión residual procedente de algo sucedido en tu vida, esta tensión ejerce un efecto en el funcionamiento de las válvulas del sistema de energía; es posible que éstas se «atoren» y, en consecuencia, que no se abran ni cierren con la debida suavidad.

Cada uno de los chakras está relacionado con una de las glándulas endocrinas así como con un determinado grupo de nervios, con un plexo nervioso. Cuando experimentamos tensión en algún aspecto de nuestra consciencia, la experimentamos también en el chakra asociado con esa parte de la consciencia.

De esa manera, la tensión se transmite a la glándula endocrina asociada con ese chakra. Esta glándula segrega hormonas que provocan cambios químicos en el cuerpo. Así pues, un cambio en la consciencia genera un cambio en la química corporal, dependiendo de las necesidades del momento.

EL CHACRA ROJO

Conocido también como chakra raíz, centro de la seguridad y muladhara.

Ubicación: En el perineo, el punto localizado entre el ano y los órganos sexuales.

Partes del cuerpo: Las partes del cuerpo asociadas con este chakra son el sistema linfático y el sistema óseo (dientes y huesos), la próstata en los hombres, el plexo sacro y las partes del cuerpo y las funciones controladas por este plexo.

Entre ellas están la vejiga y el sistema de excreción, así como las extremidades inferiores (las piernas y las partes que las componen: pies, tobillos, etc.).

Sentido: El sentido físico asociado con este chakra es el sentido del olfato, el sentido básico relacionado con la supervivencia. Por lo tanto, el órgano relacionado con dicho sentido, la nariz, está también asociado con el Chakra Rojo.

Consciencia: El Chakra Rojo está relacionado con los aspectos de la consciencia que tienen que ver con la seguridad, la supervivencia y la confianza. Para la mayoría de las personas, los aspectos de su vida relacionados con la seguridad tienen que ver con el dinero, el hogar y el trabajo. El hecho de sentirse «a gusto» y de estar presentes en el aquí y ahora, también se relaciona con este chakra.

Elemento: El elemento que se asocia con el Chakra Rojo es la tierra. Este chakra refleja, por lo tanto, las relaciones del individuo con la tierra así como sus sentimientos de existencia en ella.

El Chakra Rojo refleja también la relación del individuo con su madre. En la estructura tradicional de la familia, la madre es quien provee el alimento y el espacio de seguridad. Un bebé que se alimenta del seno materno toma decisiones sobre cómo son las cosas («siempre hay abundancia» o «nunca hay suficiente» o «tienes que luchar para conseguir lo que deseas»).

La relación que el bebé guarda con su madre establece los patrones de conducta que esa persona tendrá en el futuro con todo aquello que represente seguridad (hogar, trabajo y dinero).

Cuando la persona experimenta una sensación de separación de su madre y siente que no es amado por ella, corta de raíz esos sentimientos generando un bloqueo en el Chakra Rojo o Chakra Raíz.

El efecto que ello provocará, es decir la forma en que el individuo experimentará este hecho en su consciencia, será crear un filtro de inseguridad o de miedo a través del cual verá el mundo hasta que nuevamente se abra y permita ser alimentado por el amor de su madre.

Otro síntoma que puede experimentar alguien carente de raíces podría ser el no tener un hogar, no sentirse enraizado, no basar sus percepciones en experiencias reales y tener dificultad para estar presente en el aquí y ahora.

Cuando el Chakra Rojo está limpio, la persona es capaz de sentir seguridad, de sentirse «en casa», experimentar solidez y firmeza. Puede entonces sentirse presente en su cuerpo físico y estar presente también en el aquí y ahora y funcionar en el mundo físico, material. Podrá confiar en sus percepciones y en general no tendrá problemas de confianza.

Emocionalmente, la tensión en el Chakra Rojo se experimenta como inseguridad; si esa inseguridad es mayor se manifestará como miedo, pero si es aún más intensa se experimentará como una amenaza a la supervivencia. Si la tensión continúa durante un tiempo considerable o es demasiado intensa, la persona desarrollará un síntoma en alguna parte del cuerpo o en una función biológica asociada con el Chakra Rojo, o bien en alguna región del cuerpo controlada por ese chakra.

EL CHAKRA NARANJA

Conocido también como: centro de la sensación, chakra esplénico o del bazo, hara y svadhistana.

Ubicación: Centro del abdomen.

Partes del cuerpo: Entre las distintas partes del cuerpo asociadas con este chakra se encuentran el sistema reproductivo, los órganos sexuales y el plexo lumbar, así como aquellas partes y funciones del cuerpo que son controladas por el plexo lumbar y también las de la región abdominal. Las glándulas endocrinas asociadas con este chakra son las gónadas (los testículos y los ovarios).

Sentido: El sentido físico asociado con este chakra es el sentido del gusto y el apetito. Por lo tanto, la lengua, como órgano del gusto, está relacionada con el segundo chakra. Este segundo chakra se encuentra también asociado con el aspecto del sentido del tacto relacionado con las sensaciones.

Consciencia: El Chakra Naranja está relacionado con los aspectos de la consciencia que tienen que ver con la comida y el sexo, así como con la procreación de los hijos. Cuando existe una tensión en las regiones corporales controladas por este chakra, se está reflejando una tensión en la consciencia, un apego o una aversión relacionada con la comida, el sexo o la procreación. Puede también estar reflejando emociones reprimidas sobre sucesos que ocurrieron en la vida de la persona en el momento en que se presentó el síntoma.

Elemento: El elemento que se asocia con el Chakra Naranja es el agua. Este chakra refleja la relación de la persona con ella. Si existe una relación no armónica con el agua (con la natación o con estar a bordo de un barco, por ejemplo), podremos deducir que la relación que esa persona guarda con el agua es un reflejo de su relación con los aspectos de su consciencia que precisamente el agua representa, es decir, la comida y el sexo.

Cuando se presenta un síntoma cuya consecuencia es la incapacidad de alguien para tener hijos, podremos decir que dicha incapacidad comenzó primero con la decisión de no tener hijos; más tarde, el cuerpo se encarga de materializar esa decisión. Puesto que creemos que todo se puede curar, pensamos que también es posible anular las viejas decisiones; para ello se necesita primero ser consciente de ellas y luego tomar otras nuevas a niveles de consciencia profundos.

EL CHAKRA AMARILLO

Conocido también como: chakra del plexo solar, centro de poder, manipura.

Ubicación: Plexo solar.

Partes del cuerpo: Entre las distintas partes del cuerpo asociadas con este chakra se encuentran el sistema muscular, la piel como sistema, el plexo solar, el intestino grueso, el estómago, el hígado y los demás órganos y glándulas situados en la región del plexo solar. En lo que respecta al sistema endocrino, el páncreas es la glándula que se asocia con este chakra.

Sentido: El sentido físico relacionado con este chakra es el sentido de la vista. Por lo tanto, los órganos de la vista, los ojos, se asocian igualmente con el Chakra Amarillo.

Consciencia: Los aspectos de la consciencia asociados con este chakra son, entre otros, las percepciones relacionadas con el poder, el control, la libertad, la facilidad con la que uno puede ser uno mismo-facilidad de ser—. La actividad mental se encuentra también asociada con este chakra.

Como el Chakra Amarillo está relacionado con el sentido de la vista, podemos decir que todas las personas con algún daño en la vista han experimentado alguna tensión en su consciencia, relacionada con los aspectos de ésta que tienen que ver con el Chakra Amarillo.

Cualquier síntoma que afecte a la visión de una persona, en consecuencia, se puede considerar como el principio de una carencia de voluntad para ver alguna cosa o para mirar algún asunto de su vida interna, con el cual el individuo no se siente a gusto. Si la persona decidiera verlo y observara lo que siente con respecto a eso, tendría que resolverlo o al menos hacer algo al respecto.

En lo que respecta al sistema endocrino, cuando el páncreas se ve afectado (como en el caso de la diabetes), el síntoma puede considerarse como una incapacidad para metabolizar el azúcar. Si vemos tal situación desde el punto de vista de que la misma persona la ha creado, podríamos afirmar que lo que intenta es mantenerse lejos de la dulzura.

Cuando alguien se aproxima demasiado a otra persona haciéndolo con dulzura, ésta última siente amenazada su capacidad de ser ella misma, y entonces genera una emoción que tiene por objeto mantenerla distanciada con tal de sentir seguridad. Esta emoción es enfado; en consecuencia, la diabetes se considera asociada con un enfado reprimido; se presenta cuando una persona experimenta enfado por algo pero no siente la libertad de expresarlo.

Se cree que la diabetes es una enfermedad hereditaria; sin embargo, también podemos elegir considerar que una enfermedad está asociada con una forma de ser en particular. Si en una familia un niño imita la forma de ser que predispuso a su padre o a su madre a contraer un síntoma en su persona, el niño creará en sí mismo el mismo síntoma. Cuando esa forma de ser se modifique, el síntoma desaparecerá.

El elemento que está relacionado con el Chakra Amarillo es el fuego; la relación de éste con el sol podría compararse con la relación que una persona guarda con los aspectos de su consciencia que este chakra representa. A una persona sensible al sol, por tanto, podría atribuírsele tener una especial sensibilidad hacia el poder, el control o la libertad.

Si se presenta un problema de tipo cutáneo que nos haga pensar que esa persona ha estado expuesta al sol durante mucho tiempo, podríamos interpretarlo como una excesiva energía o atención en la zona del chakra del plexo solar.

EL CHAKRA VERDE

Conocido también como chakra cardiaco, centro del amor vivo, anahata

Ubicación: En el centro del pecho

Partes del cuerpo: Este chakra se encuentra asociado con el corazón y el sistema circulatorio, así como con el plexo cardiaco, los pulmones y toda el área pectoral. La glándula endocrina que está relacionada con este chakra es el timo, que controla el sistema inmunológico.

Sentido: El sentido físico asociado con este chakra es el sentido del tacto. Este sentido (el tacto) puede estar relacionado con el Chakra Naranja en cuanto a su aspecto de sensación, pero en este caso su relación se refiere a la manera en cómo una persona siente cuando se la toca y a su relación con el individuo que habita el cuerpo.

El Chakra Verde se asocia con la relación, con el área de relaciones en la vida de una persona y con sus percepciones del amor. Puede ser una relación de compañeros o un vínculo con alguna persona afectivamente cercana, como los padres, hijos o hermanos. Cuando esa relación tiene que ver con el amor, puede percibirse como un proceso de dar o recibir amor. O bien puede ser experimentada como el hecho de encontrarse en un espacio compartido en el que el amor se vive y fluye, donde hay un sentido de «inclusión», no necesariamente como sólo dar y recibir.

Elemento: El elemento que se asocia con este chakra es el aire. Podemos afirmar que la relación de una persona con el aire reflejará sus relaciones con el amor. En las personas que tienen algún problema con el aire, es decir, con la respiración, como puede ser asma o enfisema, su «incapacidad» para inspirar o espirar refleja sus decisiones relacionadas con aceptar o rechazar el amor.

La apertura del Chakra Verde puede ser un proceso de autoaceptación, en el que los juicios sobre sí mismo son remplazados por amor propio. Más que buscar razones para creer que debes cambiar tu forma natural de ser y aquello que es verdad para ti, la idea es que te des cuenta de lo importante que es tu individualidad y tu unicidad. De ese modo podrás admitir tu forma de ser que para ti es natural, sin tener que emitir juicios sobre ella; y así, verás cómo los demás terminarán apreciándola.

EL CHAKRA AZUL

Conocido también como: chakra de la garganta, centro dé la abundancia, visuddha.

Ubicación: Base de la garganta

Partes del cuerpo: En lo que respecta al nivel físico, controla la garganta y el cuello, así como los brazos y las manos; está asociado con el plexo cervical o braquial. La glándula endocrina relacionada con este chakra es la braquial. La glándula endocrina relacionada con este chakra es la tiroides.

Sentido: El sentido físico que se asocia con este chakra es el sentido del oído y, por lo tanto, también sus órganos, es decir, los oídos.

Consciencia: El Chakra Azul está relacionado con los aspectos de expresión y recepción, así como con las creencias que tienen que ver con la manifestación de los objetivos personales. Se encuentra asociado también con el proceso que se da al escuchar la intuición y con el estado de consciencia que uno experimenta al fluir junto con ese proceso. Algunos lo llaman Abundancia; otros lo conocen como Gracia.

Éste es también el primer nivel de consciencia desde el cual uno experimenta de forma directa una sensación de interacción con lo que algunos llaman Inteligencia Superior, así como con el «espacio» que nos rodea, tu «espacio».

Elemento: El elemento asociado con este chakra es el conocido como éter, que se define como el elemento más sutil y que corresponde, en cuanto al nivel físico, al espacio profundo. Se trata de un vacío, pero que todavía se considera como parte del universo físico.

Desde el punto de vista del proceso de expresión que asociamos con el Chakra Azul, éste puede representar los procesos de comunicación y discusión. También representa la expresión de una persona en cuanto a lo que considera como verdadero, o bien, de lo que se encuentra en su interior.

En este sentido, también está relacionado con las diversas formas de expresión, como la danza, la música, la pintura o cualquier otro proceso a través del cual uno deja salir lo que tiene dentro, cuando lo que se hizo fue hecho sólo por realizarlo, a fin de expresar algo.

Si el padecimiento se encuentra en la garganta, del lado de la voluntad, significará que la persona ha experimentado algún tipo de resistencia para expresar sus sentimientos. En este sentido, el hecho de expresar lo que quieres o el hecho de expresar tus sentimientos con objeto de alcanzar lo que te hace feliz refleja los pasajes bíblicos que dicen: «Busca y encontrarás» y «Llama a la puerta y se te abrirá» o «Pide y recibirás».

EL CHAKRA ÍNDIGO

Conocido también como: chakra frontal, centro de consciencia, tercer ojo, ajna.

Ubicación: En el centro de la frente.

Partes del cuerpo: Este chakra se asocia con la frente y las sienes, el plexo carótido y la glándula pituitaria, controladora del sistema endocrino. Las disfunciones de este chakra se asocian con problemas de crecimiento, originando gigantismo o enanismo.

Sentido: El sentido asociado con el Chakra índigo es el conjunto de todos los sentidos internos, que corresponden a cada uno de los sentidos físicos externos. Por ejemplo, el sentido externo de la vista está asociado con la clarividencia; el sentido externo del oído está relacionado con el sentido de clariaudiencia, y así sucesivamente.

La combinación de todos estos sentidos internos se conoce como Percepción Extrasensorial o PES, y es el grupo de sentidos que van más allá de lo físico; es una comunicación espíritu-espíritu. Las capacidades naturales para comunicarnos con el Espíritu o con los espíritus, para sentir las energías sutiles y trabajar con ellas se encuentran asociadas con este chakra.

Consciencia: Este chakra está relacionado con el profundo nivel de existencia que llamamos
Espíritu, el lugar en donde están nuestras verdaderas motivaciones, que en nuestra sociedad occidental se conoce como subconsciente o inconsciente; está relacionado asimismo con lo que consideramos espiritualidad y perspectiva espiritual.

Elemento: El elemento que está asociado con este chakra es una vibración, un elemento no físico conocido como Sonido Interno. Se trata del sonido que uno oye en sus oídos, pero que no procede de una fuente física.

Mientras nuestra sociedad occidental lo considera una situación patológica cuya causa se desconoce, en algunas tradiciones orientales (por ejemplo, en el Kriya Yoga) la capacidad para escucharlo se considera como requisito para un crecimiento espiritual más profundo.

EL CHAKRA VIOLETA

Conocido también como sahasrara.

Ubicación: Cúspide de la cabeza.

Partes del cuerpo: A diferencia de los demás chakras, que se asocian con un plexo en particular, este chakra está relacionado con el cerebro y con el sistema nervioso. Cualquier síntoma que afecte al sistema nervioso como un todo, por ejemplo, la esclerosis múltiple o la enfermedad de Parkinson, reflejará una tensión existente en el Chakra Violeta y en aquellos aspectos de la consciencia asociados con este chakra. El cabello y las uñas, compuestos fundamentalmente de tejido nervioso, están relacionados con este chakra, al igual que la parte superior de la cabeza.

El Chakra Violeta está relacionado con la glándula pineal, cuyas funciones, en su mayor parte, continúan siendo un misterio para la ciencia, aunque algunas de las que se conocen están relacionadas con la producción de melanina, una sustancia que responde a la luz y que se encarga de generar el pigmento en nuestra piel.

Sentido: El sentido asociado con este chakra es la empatía, el experimentar la experiencia de otra persona como si fuera propia. Es un aspecto de la unión con esa persona.

Consciencia: El Chakra Violeta representa la parte de nuestra consciencia relacionada con las percepciones sobre la unión y la separación. Asimismo, representa la relación con nuestro padre y con la autoridad en general.

Elemento: El elemento asociado con el Chakra Violeta es una sutil vibración espiritual conocida como Luz Interna. La Luz Interna es lo que uno vive al llegar al nivel más profundo de su ser, experimentándose a sí mismo como un punto en el que inteligencia y consciencia se funden.

Esta fusión, aunque realmente no es blanca ni tampoco es en verdad luz alguna, se conoce como Luz Blanca, pues es la forma más aproximada que tenemos para describirla desde el punto de vista de nuestros sentidos físicos.

En el proceso de curación, cuando un sanador entra en la consciencia de la persona que está curando, en ocasiones siente lo que la otra persona está sintiendo, como si la curación se estuviera desarrollando dentro de los dos.

Resulta sencillo por consiguiente, entender por qué algunas personas absorben los síntomas de aquellos a quienes están curando. Los sanadores pueden experimentar lo que las otras personas sienten a través de lo que llamamos empatía; sin embargo, si el sanador en su propia consciencia no ha creado las situaciones relacionadas con tales síntomas, no los desarrollará en su estructura física.

Así como el Chakra Rojo refleja nuestra relación con la Madre Tierra, el Chakra Violeta representa nuestra relación con Nuestro Padre (Que Está en el Cielo). Dentro de la estructura tradicional de la familia, la madre es quien proporciona la alimentación y un lugar seguro; el padre es el encargado de establecer una dirección. La relación que una persona guarda con su padre biológico establece los patrones para las futuras relaciones que esa persona tendrá con la autoridad, e igualmente, sentará las bases para su relación con Dios, dentro de un paradigma que incluya la creencia en El.

Cuando alguien experimenta un sentimiento de separación de su padre o no se siente amado por él, su Chakra Violeta se cerrará. Desde el punto de vista del funcionamiento del sistema de energía, ello crea mecánicamente una sensación de aislamiento, como si la persona se encontrara dentro de una concha, lo cual provocará que quienes están fuera de esa concha no puedan establecer ningún contacto con el ser que está dentro de ella, quien al mismo tiempo no podrá tener contacto con el mundo exterior. Este tipo de personas siempre parecerán diferentes ante los ojos del mundo que las rodea.

LA LUZ BLANCA

La Luz Blanca se conoce, desde el punto de vista esotérico, como la forma más elevada de protección espiritual y a menudo se la emplea para crear la percepción de que se está protegido de algo amenazante. Cuando te llenas a ti mismo de Luz Blanca y te circundas de ella, te podrás sentir protegido.

Al experimentarla te sentirás seguro y más relajado. Cuando te relajes y te abras más, brillarás con más Luz Blanca y te sentirás más seguro. Este proceso continuará hasta que te encuentres totalmente abierto, completamente relajado y sintiéndote protegido e inmerso en la Luz Blanca.

Cuando percibas que alguien tiene un problema o un problema potencial («estoy preocupado por esto o por tal persona, espero que esté bien») puedes imaginar a esa persona llena y rodeada de Luz Blanca, así como puedes percibir que esa persona, en efecto, se encuentra bien.

Dado que el Chakra Violeta representa la parte más profunda de la consciencia de la persona, cuando éste se abra, el sanador podrá mirar desde este chakra todo el trayecto, hasta el Chakra Rojo.

Cuando sea capaz de realizar esto, le pedirá a la Luz Blanca que entre desde arriba por el Chakra Violeta, que recorra todo el camino hasta llegar a los dedos de los pies y que llene todo de abajo arriba.

Dado que la Luz Blanca llega a todos los chakras, cada uno de ellos brillará con su color propio de forma más intensa y clara que antes. Cuando la Luz Blanca desborda el Chakra Violeta, el sujeto se llena de luz y queda rodeado de ella. El sanador sabe entonces que la curación se ha completado.

La visión final debe ser la del sujeto lleno de Luz Blanca, con cada uno de sus chakras brillando intensamente con su color natural, con las raíces recibiendo alimento del centro de la tierra, rayos azules saliendo de las palmas de las manos para llegar a algún punto delante del sujeto; con su chakra coronario abriéndose como una flor de loto y con la Luz Blanca fluyendo hacia la persona, inundándola y rodeándola. El sujeto deberá sentirse muy distinto a cómo se sentía antes de la curación. Pregúntale y verás hasta qué grado la curación se ha efectuado.

La naturaleza de la consciencia es perseguir el logro de sus objetivos.

De acuerdo con nuestra definición de consciencia, identificamos tres niveles de existencia a los que llamamos alma, espíritu y personalidad. El alma es la parte que viaja de una vida a otra, y que en cada vida toma una forma diferente, a la que llamamos espíritu. El espíritu, en consecuencia, es la forma individualizada que la consciencia toma dentro de un determinado periodo de vida, con experiencias y talentos particulares, a fin de alcanzar los propósitos de ese espíritu que somos, dentro del periodo de una vida.

Cuando llegas al final de la vida sin haber consumado tus objetivos, tienes la oportunidad de elegir otra vida diseñada para completar tus metas inconclusas y manifestar tu alma en otro espíritu. Cuando lo hagas y te fijes más objetivos, el proceso continuará hasta que hayas experimentado todo lo que has pedido. Entonces irás a otro lugar y realizarás más cosas en otro universo. Este proceso continúa para siempre. La única constante es el cambio. A través del cambio aprendemos y por medio del aprendizaje crecemos. La naturaleza de la consciencia —que es lo que somos— debe crecer a través del aprendizaje, a través del cambio.

Se dice que lo que pensamos en el momento de la muerte permanece con el ser cuando éste abandona el cuerpo.

La parte de nuestra consciencia que abandona un periodo de vida y elige entrar en otro es lo que conocemos como alma. En consecuencia, si se lleva una situación de desequilibrio de una vida a otra, será necesaria una curación al nivel del alma.

La posición más utilizada en el Sistema Cuerpo-Espejo es colocar al sujeto sentado en una silla con una abertura en el respaldo, que permita al sanador tener acceso a la espalda de la persona y a la base de la espina dorsal. De esta manera seremos capaces de alcanzar prácticamente cualquier parte del cuerpo de la persona.

El sujeto se sienta con los pies apoyados en el suelo, con sus manos en el regazo, con las palmas hacia arriba y con los ojos cerrados. Ésta es una posición física que refleja una postura interna de apertura y esperanza positiva. Los ojos estarán cerrados a fin de que el sujeto concentre su atención en estar simplemente presente y abierto a la curación. De esa manera su consciencia estará abierta al sanador, permitiéndole verla totalmente. El hecho de esconder alguna parte de la consciencia al sanador, lo único que reflejará es la decisión de que esa parte de la consciencia no quede curada, o bien de no experimentar integridad en ese aspecto de la consciencia. La apertura total es lo más efectivo.

Tiene que existir la expectativa de que cuando la curación se complete, las cosas serán diferentes; igualmente, tiene que haber un positivo sentido de esperanza, para ver después de la curación los efectos que ésta ha tenido.

Cuando la persona abre los ojos, el primer pensamiento que debe venirle es que la curación ha tenido lugar. Entonces podrá hacer un balance personal de cómo se siente con respecto a su cuerpo, a su consciencia y a cualquier sensación o función que hubiera estado deteriorada antes; de esa manera notará cómo se siente ahora en comparación a cómo se sentía antes de la curación. Su primer pensamiento debe dirigirse hacia lo que es diferente, de modo que lo perciba como algo mejor, incluso si sólo se siente «más relajado».

Cada tipo de enfermedad se encuentra asociada con una particular forma de ser.

Hay un tipo de personalidad que se relaciona con padecimientos cardiacos, otro con cáncer, otro con la miopía. En estos casos, la forma de ser de la persona está relacionada con un estrés, que llega al nivel físico manifestándose como un síntoma.

Así, podemos afirmar que el proceso de curación implica un proceso de transformación. De acuerdo con mi experiencia, la recuperación de una terrible enfermedad siempre va acompañada por un cambio en la forma de ser del sujeto. O uno cambia, o continúa sufriendo síntomas hasta el día de su muerte. La persona que cambia será capaz de ver las cosas de manera diferente y notará que todo sucede de un modo distinto a como ocurría antes. Esa persona tendrá la capacidad de definir diferentes creencias a través de diferentes experiencias. O bien podrá primero definir creencias diferentes y luego tener experiencias diferentes.

Por consiguiente, es importante prestar atención a las palabras que empleas para describirte a ti mismo. Si estás describiendo algún rasgo que no te parece muy afortunado («soy tímido» o «tengo miedo al éxito» o «soy por naturaleza irritable»), con tus mismas palabras transfórmalo en pasado, permitiéndote una percepción diferente en el momento actual y en el futuro («fui tímido, tenía miedo al éxito, era irritable porque realmente no era yo mismo, etc.»).

De esa manera te será más fácil dejar de identificarte con las viejas ideas y, por lo tanto, deshacerte de ellas, así como de las tensiones asociadas con los síntomas que se deben eliminar.

Cómo curar mediante la Luz Blanca

El sanador, cuyas manos brillan con Luz Blanca, imagina que está llenando al sujeto con esa luz a través de los hombros hasta la parte superior de la cabeza, bajando después a través del cuerpo hasta los dedos de los pies, llenando también los brazos, hasta la piel. Esto puede hacerse dejando las manos sobre los hombros del sujeto.

El sanador puede imaginarse a sí mismo llenando al sujeto de Luz Blanca de cualquier manera que elija. Puede imaginar una sustancia blanca que fluye desde sus manos y llena al sujeto; o bien puede imaginar que el sujeto se encuentra lleno de millones de pequeños tubos fluorescentes y que cuando la energía que sale de las manos del sanador toca esos tubos en una zona particular del cuerpo, dicha zona comienza a brillar.

Cualquier cosa que seas capaz de hacer en contacto con el sujeto, también la podrás hacer a distancia. El grado de lejanía no importa: puedes estar en cualquier lugar, separado de él unos cuantos milímetros o miles de kilómetros. De hecho, no trabajamos con el cuerpo físico, sino con la consciencia, la cual no entiende de limitaciones de tiempo ni de espacio.

Si existieran razones para no tocar al sujeto, de orden filosófico o religioso, por ejemplo, el sanador podrá actuar de la misma forma que en una curación de contacto, simplemente manteniendo sus manos alejadas del cuerpo sin establecer un contacto real y trabajando a una distancia de milímetros o centímetros del cuerpo del sujeto.

Fin del Resumen

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